Enseñar comandos básicos a tu perro no solo mejora la convivencia, sino que también fortalece el vínculo entre ustedes, estimula su mente y previene comportamientos no deseados. Además, tener un perro que responde a órdenes simples puede evitar situaciones peligrosas en la calle, durante paseos o al interactuar con otras personas o animales.
En este artículo, aprenderás cómo enseñar comandos esenciales a tu perro de manera efectiva, desde casa y usando técnicas de refuerzo positivo. No necesitas experiencia previa: solo constancia, paciencia y muchos premios.
¿Por qué es importante enseñar comandos básicos?
Los comandos son herramientas de comunicación entre el perro y su tutor. Sirven para:
- Establecer límites claros.
- Aumentar la seguridad del perro.
- Facilitar la vida diaria (paseos, visitas, encuentros).
- Prevenir accidentes.
- Estimular mentalmente al perro.
- Mejorar la obediencia sin usar castigos.
Incluso si no planeas hacer adiestramiento avanzado, conocer estos comandos puede cambiar por completo la relación con tu mascota.
¿Cuál es el mejor momento para empezar?
Cuanto antes, mejor. Los cachorros pueden empezar a aprender desde las 8 semanas, siempre con sesiones cortas y positivas.
Pero si tu perro ya es adulto, ¡no te preocupes! Nunca es tarde para aprender.
Lo más importante es que el perro se sienta motivado y en un ambiente tranquilo y sin distracciones.
Principios del adiestramiento positivo
Antes de empezar, ten en cuenta estos pilares:
- Usa recompensas (snacks, caricias, palabras).
- Nunca castigues ni grites.
- Sé consistente con las palabras y los gestos.
- Entrena en sesiones cortas (5 a 10 minutos).
- Termina siempre con una nota positiva, incluso si no logró todo.
Comando 1: “Sentado”
Uno de los comandos más fáciles y útiles.
Cómo enseñarlo:
- Toma un snack y colócalo cerca de la nariz del perro.
- Muévelo lentamente hacia arriba y hacia atrás (sobre su cabeza).
- Cuando se siente naturalmente para seguir el movimiento, di “sentado” y dale el premio.
- Repite varias veces al día por algunos minutos.
Consejos:
- No empujes su trasero: puede causarle incomodidad.
- Si se levanta antes de recibir el premio, empieza de nuevo.
- Refuerza con voz alegre: “¡Muy bien, sentado!”
Comando 2: “Quieto”
Ideal para controlar al perro en situaciones de riesgo o evitar que corra.
Cómo enseñarlo:
- Pide primero “sentado”.
- Muestra la palma de tu mano frente a su cara y di “quieto”.
- Da un paso atrás. Si no se mueve, premia.
- Aumenta gradualmente la distancia y el tiempo.
- Si se mueve, vuelve al paso anterior.
Consejos:
- Entrena en ambientes sin distracciones al principio.
- Avanza lentamente: la paciencia es clave.
- Usa voz firme pero calmada.
Comando 3: “Ven” o “Aquí”
Llamar al perro es vital, especialmente en lugares públicos.
Cómo enseñarlo:
- Agáchate y abre los brazos mientras dices su nombre + “ven” o “aquí”.
- Cuando se acerque, prémialo de inmediato y elógialo con entusiasmo.
- Practica en casa, luego en el jardín y, por último, en la calle con correa.
Consejos:
- Nunca uses este comando para cosas negativas (baño, castigo).
- No lo persigas si no viene: puede convertirse en un juego.
- Usa premios especiales solo para este ejercicio.
Comando 4: “Abajo” o “Echado”
Ayuda a que el perro se relaje o permanezca tranquilo en lugares públicos o visitas.
Cómo enseñarlo:
- Pide “sentado”.
- Con un premio en la mano, bájalo lentamente al suelo desde su nariz hacia el pecho y hacia adelante.
- Cuando se acueste, di “abajo” o “echado” y premia.
- Repite varias veces.
Consejos:
- Si se levanta, no premies. Vuelve a empezar.
- Algunos perros tardan en acostarse; ten paciencia.
- Refuerza con voz suave y premios frecuentes.
Comando 5: “No” o “Suelta”
Sirve para detener una acción no deseada (comer algo del suelo, morder un objeto, etc.)
Cómo enseñarlo:
- Muestra un premio cerrado en tu mano.
- El perro intentará tomarlo; di “no” o “suelta” sin gritar.
- Cuando se aleje o pierda interés, abre la mano y prémialo.
- Repite hasta que entienda que alejarse = recompensa.
Consejos:
- Nunca tires con fuerza un objeto de su boca: puede dañar sus dientes.
- Usa este comando con juguetes también.
- Practica en diferentes contextos.
Comando extra: “Mírame”
Ayuda a que el perro te preste atención antes de otros comandos.
Cómo enseñarlo:
- Coloca un snack cerca de tu rostro.
- Cuando el perro te mire, di “mírame” y prémialo.
- Repite varias veces, aumentando gradualmente el tiempo de contacto visual.
Consejos:
- Este comando es excelente para interrumpir distracciones.
- Úsalo antes de paseos, juegos o alimentación.
Consejos para tener éxito en casa
- Entrena cuando el perro esté tranquilo, no después de comer ni muy cansado.
- Usa siempre el mismo tono y palabras.
- Evita entrenamientos largos: 5-10 minutos es suficiente.
- Sé paciente. Algunos perros aprenden en días, otros en semanas.
- Cambia los premios por caricias y palabras poco a poco, pero no elimines las recompensas del todo.
Qué hacer si tu perro no responde
- Revisa si hay muchas distracciones.
- Reduce la dificultad: vuelve a pasos más simples.
- Aumenta el valor del premio.
- Revisa tu lenguaje corporal: ¿estás claro y relajado?
- Pide ayuda a un adiestrador si el problema persiste.
Errores comunes al entrenar en casa
- Usar castigos o gritos.
- Cambiar las palabras o comandos.
- Entrenar cuando el perro está estresado.
- Repetir el comando muchas veces seguidas sin esperar respuesta.
- No ser constante (solo entrenar un día sí y otro no).
Educar con amor es la clave del éxito
Enseñar comandos básicos es una de las formas más efectivas de mejorar la vida de tu perro y de toda la familia. No necesitas ser experto ni tener mucho tiempo libre: con constancia y cariño, lograrás grandes avances.
Recuerda: tu perro quiere complacerte, pero necesita que seas claro, paciente y positivo. Cada nuevo comando aprendido es una forma más de fortalecer el vínculo especial que los une.